Cómo recuperar los conocimientos lingüísticos del colegio
Vamos a echar un vistazo a cómo puedes volver a aprender un idioma después de años sin practicarlo y compartiremos algunos consejos para recordar vocabulario que ya conocías previamente.
¿No te resulta frustrante cuando preguntas cómo se dice una palabra y te das cuenta de que ya la sabes? O cuando tienes una palabra en la punta de la lengua, pero no consigues recordarla. Es un problema habitual para los que aprendieron un idioma en el colegio y no lo han practicado mucho desde entonces. La memoria a largo plazo almacena un gran número de palabras que aprendiste en su día, así que tienes que encontrar la manera de volver a recordarlas.
Olvidamos las palabras por muchas razones, como, por ejemplo, el estrés, el cansancio o simplemente la falta de uso reciente. Vamos a echar un vistazo a cómo puedes volver a aprender un idioma después de años sin practicarlo y compartiremos algunos consejos para recordar vocabulario que ya conocías previamente.
Cómo recuperar las palabras olvidadas
Relajarse y tener paciencia
A veces, el cerebro necesita un momento para atar cabos. Relajarse ayuda a reducir el estrés, que puede hacer que se bloquee el recuerdo, lo que significa que la palabra puede aparecer en tu mente más tarde.
Utilizar asociaciones
Al pensar en palabras o situaciones relacionadas, activas vías de memoria conectadas con la palabra olvidada. Esto puede ayudar a tu cerebro a encontrar la palabra que buscas.
Hablar o escribir
Cuando se habla o escribe sobre un tema, el cerebro participa más activamente que cuando sólo se piensa en él. Cuando describes o comentas ideas relacionadas en voz alta o por escrito, la palabra puede llegar a salir a la superficie.
Repetición y exposición
Esto hace que sea más fácil recordarla en el futuro porque está más arraigada en tu memoria.
Inmersión
Sumergirse en un idioma o una cultura permite al cerebro captar y recordar muchas más palabras, incluso cuando no se utiliza activamente el idioma. Las pistas contextuales pueden ayudarte a refrescar la memoria y a aprender nuevas palabras más rápidamente. Si no puedes visitar un país extranjero o conocer a hablantes nativos, intenta ver películas o programas de televisión en inglés, tanto de forma activa como ruido de fondo mientras realiza otras tareas.
Establecer pequeños objetivos
Fijarse objetivos pequeños y alcanzables hace que volver a aprender un idioma sea menos abrumador, lo que le permite ver rápidamente los progresos y aumentar su confianza. Si te centras en tareas sencillas, como aprender unas cuantas palabras nuevas cada día, irás reconstruyendo gradualmente tus conocimientos lingüísticos sin desanimarte.
Cómo volver a aprender un idioma
En primer lugar, tienes que refrescar tus conocimientos previos. Puedes empezar por repasar los apuntes que tengas, aunque sean del colegio. Si ya no tienes los cuadernos de ejercicios, puedes ver vídeos en Internet, descargarte una aplicación de idiomas o comprar un libro de inglés básico para principiantes para refrescar la memoria.
Si crees que no puedes recordar lo que ya has aprendido, deberías volver a lo básico. Para ello, preséntate en voz alta, finge que hablas con alguien, practica los números, los colores y en general, vocabulario básico, y luego haz frases sencillas con sujeto y verbo en presente. Si esto te parece demasiado sencillo, pasa a tiempos verbales más complicados. Puedes practicar los verbos y otros aspectos gramaticales con libros de ejercicios, apps de idiomas, vídeos de YouTube u otras plataformas lingüísticas.
Reten mejor las palabras con tu Entrenador de palabras
Siempre que encuentres una palabra nueva o una que acabas de recordar después de mucho tiempo, deberías añadirla a tu Entrenador de palabras en LiveXP. Así podrás practicarla hasta que la recuerdes con facilidad. El Entrenador de palabras es una función gratuita de la aplicación LiveXP que utiliza un algoritmo de repetición espaciada, ajustando la frecuencia de los repasos de palabras en función del progreso del alumno para mejorar la retención de la memoria a largo plazo. Esto mejora el aprendizaje de idiomas, ya que te ayuda a ampliar tu vocabulario y a recordarlo durante más tiempo.
Utiliza una ruta de aprendizaje
Si estás intentando retomar el aprendizaje del inglés, puedes probar una ruta de aprendizaje personalizada, que proporciona un plan de aprendizaje día a día para una práctica constante. El Plan personalizado de LiveXP crea un plan de aprendizaje adaptado a tus objetivos. Se ajusta en función de tu progreso, centrándose en las áreas en las que necesitas más ayuda, ya sea vocabulario, gramática o habilidades conversacionales. Esto hace que tu viaje por el aprendizaje de idiomas sea más eficiente y se adapte a tus objetivos personales.
Toma clases para refrescar tus conocimientos
Tomar clases de inglés con un profesor particular te permite repasar conceptos clave, practicar tus destrezas y completar tus conocimientos. Ya sea para repasar la gramática, el vocabulario o la conversación, las clases pueden ayudarte a reforzar lo que has aprendido previamente y a mantener tus habilidades lingüísticas al día. Con las lecciones de LiveXP, puedes elegir la duración y el número de lecciones por semana para encontrar el equilibrio adecuado para ti, tanto si quieres sumergirte en el agua como si quieres dar el salto a la fluidez en inglés. No dude en aumentar el número o la duración de las lecciones a medida que progrese, para aumentar la intensidad y acelerar su aprendizaje.
Conclusión
En conclusión, retomar el aprendizaje de un idioma después de una larga pausa puede suponer un reto debido al vocabulario olvidado, la gramática oxidada y la fluidez reducida. Para superarlo, empieza con sesiones de repaso, en las que vuelvas a ver las nociones básicas de gramática y vocabulario o leas tus antiguos apuntes de clase. A continuación, utiliza aplicaciones de idiomas para practicar a diario y participa en actividades de inmersión, como ver programas de televisión o conversar con hablantes nativos. Por último, asegúrate de tener expectativas razonables. Fíjate objetivos pequeños y fáciles de alcanzar para aumentar tu confianza. Los pequeños éxitos te mantienen motivado y, a su vez, hacen que el gran objetivo de la fluidez sea mucho más alcanzable con el tiempo.